Apetece comer castañas asadas, en el sofá, tapados con la mantita y eligiendo la serie de Netflix, Filmin o HBO… Pero da mucha pereza cocinarlas en esas sartenes raras o encender el horno -con lo que gasta- por unas simples castañas.
Las castañas son un alimento de temporada, de otoño, con un montón de beneficios para la salud.
Hemos probado de asarlas con la freidora de aire. Te adelantamos que han quedado GENIALES.
Preparación
Lo primero de todo es comprar castañas de buena calidad: del Montseny o gallegas. Las castañas chinas no salen tan buenas. Y eso se nota en el sabor y a la hora de pelarlas.

Las castañas del Montseny o las gallegas se pelan mucho mejor y saben mucho mejor. Estoy seguro que no tendréis que desechar casi ninguna. En cambio las chinas a veces no se pueden pelar o ya vienen defectuosas.
Humedecer
Cuando ya tenemos las castañas, les hacemos un corte (para que no exploten con el calor de asarlas). Después las podemos humedecer un poco. Tenemos dos maneras: o las huntamos de agua con las manos mojadas o las pasamos brevemente por debajo del grifo.



Es importante no meterlas muy mojadas en la freidora de aire. Solo un poco húmedas.
Introducir en la freidora de aire
Sin más dilación ni complicación, metemos las castañas en la bandeja de la freidora. Ponemos la freidora a entre 180ºC y 200ºC durante 10 o 15 minutos. Según nuestra preferencia.
Y esperamos.



¡Listas!
¡Y ya están listas! No hay que hacer nada más. Solo esperar que se enfríen y a comer.
Vigila no te quemes.



Recuerda…
Puedes ver otras recetas aquí.
Y después de cocinar, es importante limpiar tu freidora de aire.